Mi receta de Boloñesa

La salsa boloñesa o "ragù alla bolognese" es una de las elaboraciones más populares de la gastronomía italiana, que se utiliza mundialmente en infinidad de platos. Se prepara a base de carne picada y tomate, sin embargo, una buena salsa boloñesa, requiere de algunos ingredientes más y una forma de cocinar específica.

El secreto de una buena boloñesa está en la calidad de los ingredientes y en el mimo al cocinarla. Necesita una cocción lenta, a fuego al mínimo, y de un mínimo de dos horas para que la carne, el tomate y las verduras se hagan en condiciones, y los sabores se intensifiquen.

Pero la auténtica receta italiana esconde un secreto más que seguro no conoces. Entre los ingredientes utilizados encontramos leche. Así es, has leído bien. La boloñesa lleva leche que ayuda a suavizar la acidez del tomate y aporta cremosidad.

A continuación te dejo mi versión de boloñesa, super sabrosa, con una carne jugosa y tierna, que los más pequeños de la casa se la van a comer genial. Es perfecta para acompañar unos espaguetis, rellenar una lasaña o incluso para hacer empanadillas de carne o pimientos rellenos. Yo hago mucha cantidad y congelo en raciones, para poder ir utilizándose en distintos platos.

Ingredientes:

• Carne picada (600g ternera / 300g cerdo)

• 1 cebolla

• 1 rama de apio

• 2 dientes de ajo

• 4 zanahorias

• 250g tomate triturado

• Una cucharada de tomate concentrado

• Un vaso vino tinto

• 500 ml de leche entera

• 2 hojas de laurel

• Sal y pimienta

Elaboración:

1. Empezar cortando todas las verduras en trozos muy pequeños. Lo ideal es utilizar un robot de cocina o picadora manual. En una sartén o cacerola baja, rehogar la cebolla, el ajo y el apio en AOVE, durante unos 5 minutos. Salpimentar. Añadir la zanahoria y continuar rehogando todas las verduras unos 15 minutos o hasta que se hayan pochado bien.

   

   
   

2. Añadir la carne picada, salpimentar, e integrar bien con todo el sofrito. Ayudarnos con el dorso de la cuchara para que la carne no se apelmace y quede suelta.

   

   
   

3. Cuando la carne cambie de color, añadir el vino tinto y dejar evaporar el alcohol a fuego fuerte un par de minutos. Incorporar el tomate triturado, el concentrado de tomate y las hojas de laurel, remover bien todo el conjunto y tapar para que vaya cocinándose a fuego lento, durante unas dos horas.

   Durante la cocción, iremos removiendo de vez en cuando y añadiendo poco a poco leche, a medida que se vaya absorbiendo.

   

   
   

4. Transcurridas unas dos horas, probar y rectificar de sal y pimienta si hiciese falta. Sírvela junto a unos espaguetis, o utilízala como relleno de una lasaña. Sea cual sea el uso que le des, ¡el plato será un éxito asegurado!